El amor es el sentimiento más completo que podemos sentir los seres humanos, es aquello que está detrás de una canción, de una pintura, de una mirada y hasta del silencio.
Es lo que nos motiva y nos inspira a vivir, a reír, a soñar y en ocasiones a llorar.
Hay muchas maneras de amar y muchos tipos de amor. Amamos desde nuestro propio nacimiento, donde nos aferramos al calor, al olor y al contacto con nuestra madre y a partir de ahí experimentamos el amor más puro e incondicional que existe.
Luego con el paso de la vida conocemos el amor a la familia, a los amigos,a la naturaleza, a los animales y a la vida misma.
Crecemos dándonos cuenta que hay amor en todo lo que nos rodea, que cada cosa que hacemos en nuestra vida con amor es algo que nos satisface y nos recompensa. Pero también en nuestro camino experimentamos el sufrimiento cuando el amor falla, se acaba o se aleja.
Hoy me gustaría hablarles de como hacer para manejar el amor a distancia en especial el amor a los hijos cuando se van de casa.
Cuando los hijos llegan a nuestras vidas la cambian de manera radical, a partir de ese momento nuestras prioridades y preferencias hacen un giro de 180 grados. Nos comenzamos a dar cuenta que cada día nos convertimos más en lo que ellos necesitan.
Todo a nuestro alrededor lo adaptamos a satisfacer sus necesidades y nuestras vidas quedan en otro plano. La rutina del día a día nos va envolviendo en su mundo, que ya es el único mundo que vivimos.
Nuestro calendario se llena de citas y eventos y casi ninguno nuestro. La lista del súper la encabezan su dulce favorito y aquellas galletas que son las únicas que come. Nuestra bolsa dejó de ser elegante para transportar carritos y Barbies.
Ya no sabemos lo que es vivir sin mirar el reloj, ¿y desde cuándo no nos damos una ducha con calma, sin que haya una vocecita llamando a la puerta?
Nos conocemos los dibujos animados y las series infantiles mejor que cualquier cosa. Los parques pasaron a ser el sitio que mas visitamos y nuestra mejor amiga es ahora la mamá de su amiguito preferido.
Así, poco a poco vivimos por muchos años inmersos en el mundo de nuestros hijos. Pasamos años deseando que crezcan para que dejen de usar pañal, o de manchar el mantel al comer, o de desordenar el cuarto.
Y un día, demasiado rápido por cierto, ya crecieron.
Ya no escuchas a ese pequeño llorando a cada rato, ya nadie pinta en las paredes, ya no te llaman en la noche porque tienen miedo, ya nadie te interrumpe cuando estas al teléfono.
Ahora no van en el asiento trasero del auto, ahora son los que conducen.
Ahora tu calendario está casi vacío, el tiempo te sobra.
Podrías estar en la ducha por horas y al parque hace mucho que ni llegas.
Y es que cuando los hijos crecen la madres vivimos un amor a distancia.
Es una transición super difícil y triste, pero que debemos asumir los padres con madurez emocional para no hacer de esto algo que nos haga caer en una marcada depresión. Los psicólogos llaman a esto el Síndrome del Nido Vacío, que no es más que cuando los padres nos quedamos huérfanos de nuestros hijos.
Si para los padres los primeros años de vida de sus hijos o la adolescencia son etapas fuertes y complicadas, cuando los hijos salen de casa es uno de los momentos más difíciles a enfrentar en la crianza. Y es de vital importancia prepararse antes de que esto suceda y aquí les comparto algunos consejos para pasar por esta etapa lo más preparado posible.
Algunos consejos para enfrentar esta etapa lo más tranquilo posible y saber sacar lo bueno de ella:
- Conservar y enviar detalles que nos permitan estar cerca como por ejemplo imágenes de amor a distancia.
- Hay que saber siempre que los hijos son pequeñas esculturas que estamos moldeando poco a poco, para que un día estén totalmente hechas y salgan al mundo.
- Desde su nacimiento dale lo mejor de ti, dedícale todo el tiempo para que construyan juntos un mundo de recuerdos que llevarán siempre.
- Disfrútalos, que te sobren los abrazos y los besos y no te apures porque crezcan.
- No te sientas culpable, nunca creas que se van porque hay algo que no has hecho bien.
- Se van porque necesitan vivir independientes y probarse a sí mismos sus posibilidades y capacidades de sobrevivir.
- No hagas que ellos se sientan culpables por dejarte. No les digas que lo hacen porque no te quieren, esto les pondrá un sufrimiento innecesario.
- Dedícale ahora el tiempo a todo aquello que estuviste dejando para después por estar muy ocupada con tus hijos.
- Ahora tienes tiempo para tus hobbies.
- Rescata el tiempo para ti, para ir al salón de belleza, a almorzar con las amigas sin tener prisas, para irte de compras.
- Recupera las salidas a solas con tu pareja, la complicidad y la vida amorosa.
- Si no tienes pareja, date tiempo para el amor.
- Recuerda, pero no te martirices con el pasado. Ya crecieron y el tiempo no regresa, solo queda recordar pero seguir adelante.
- Remodela los espacios, quizás su habitación pueda ser ahora tu oficina o un salón de estudios.
- Planifica encuentros con ellos en casa o fuera para que aprendan esta nueva manera de vivir.
- Siempre déjale saber que en ti estará el amor de siempre. Que jamás dejarás de estar ahí para ellos y que su lugar en casa siempre estará guardado.
- Cuando sientas que la nostalgia y los recuerdos se apoderan de ti, escucha música, sale a caminar y busca la manera de distraerte.
Sé que quizás al leer este artículo muchas madres, dirán. . . ¡es que no es fácil!. Estoy de acuerdo, no lo es. De hecho escribo estas letras con mis ojos empañados y con el pensamiento puesto en esa partida.
El amor por nuestros hijos es tan inmenso que en ocasiones nos hace egoístas y no nos permite ver que ellos también necesitan salir del nido y levantar el vuelo. Ellos necesitan andar por sus propios pies y probar cada una de las enseñanzas que les dimos.
Necesitan caminar su camino, vivir sus experiencias, equivocarse y aprender de sus errores.
Lo mejor que debe quedarte como madre es saber todo lo que le dedicaste, todo el amor, el apoyo y las enseñanzas que le diste. Ya hiciste tu trabajo, es tiempo de recoger los frutos de tu cosecha. Siéntate a mirar en lo que se ha convertido tu pequeño.
Ahora esta etapa disfrútala también, la vida te está dando la oportunidad de verlos volar, de verlos crecer, de verlos amar. . . y si están felices, ¿qué más puedes pedir?
Ya crecieron, ya llegó el dia que tanto repetías cuando te hacía enojar, o cuando no aceptaba una regla, o cuando pasabas horas esperando que terminara sus clases de baile.
Hoy es el día . . . se fue de casa y ahora vivirán un amor a distancia, pero siempre cerca de el corazón. No hay distancia que pueda separar el vínculo que tendrán siempre… en tus brazos siempre tendrá su mejor refugio.
MAriA says
Tan cierto y tan desgarrador a la vez
Yo deje de ver a mi hIja desde que tenia 9nos y ahora tiene 25 y es ahora donde no la eh podiDo abrazarla y justaMente hoy me paso lo de el nido vacio 🙁
Giselle says
Un saludo María, que triste historia la que me cuenta. Espero la vida les regale muchos días para quererse. Y si, el nido vacío es algo que experimentamos los padres y que es muy complicado de atravesar. Mucha fuerza y un fuerte abrazo.
Giselle
Silvia de León says
El tiempo pasa muy rápido. Y nos cuesta creer que tienen que irse.
Yo tengo dos hijas y están lejos, sufro mucho su ausencia, y nunca me acostumbraré.
Giselle says
Hola Silvia!!
No sabes como te entiendo, y si es una etapa muy difícil y dura para nosotras. Pero si de algo te sirven mis palabras, léeme y busca un hobbie, un proyecto por simple que sea que no te deje caer en el sufrimiento.
Te mando un abrazo y espero te quedes cerca de aquí para acompañarte aunque sea de manera virtual.
Giselle
Maria says
[email protected]
HOLA A TODAS, LAS ENTIENDO Y JUSTO ESTOY COMENZANDO UNA NUEVA ETAPA, MI NINIO ACABA DE DESPEGAR, COMENZO LA UNIVERSIDAD Y NO DEJO DE PENSAR EN EL POR UN SEGUNDO, A MI ME ESTA RESULTANDO BASTANTE DIFICIL, PORQUE NO solo SIENTO TRISTEZA, ESTOY BIEN DEPRIMIDA Y ME SIENTO MUY FRAGIL, lloro mucho.
Giselle says
¡Hola Maria!
Gracias por tu visita y por la confianza de comentarme tu situación.
No sabes como te entiendo,y sé que es muy difícil ya que tengo un hijo que no vive en casa desde hace un tiempo.
Pero necesitas ver esto como una etapa más de la maternidad, regresara ya veras. Ahora necesita ver el mundo solo, caminar y descubrirse a sí mismo en él.
Ten paciencia, emplea el tiempo en algún hobbie, en salir con amigas, en algo que te ayude a despejar la mente y que puedas calmar esa ausencia.
Quédate cerca para que no te sientas sola.
Un fuerte abrazo,
Giselle
Giselle says
Muy pronto comenzarán sesiones online de acompañamiento en la crianza y en situaciones de familia.
Aquí en mi Web dejaré todos los detalles.
Gracias
Alina says
Hola, gracias por tan sabías palabras. Me han servido mucho, dándome apoyo. Mi hija y nieto parten para otro país y quedo sola en casa. Sé que será difícil pero con esta reflexión me ha servido mucho dándome aliento y deseo de seguir adelante. Saludos cordiales
Giselle says
¡Hola Alina!
Que bueno que te ha servido, me pongo la mano en el corazón para escribirte porque quiero que sepas que entiendo tu sentimiento.
Fuerza es lo que más necesitas ahora para ti y para ellos , que también la van a necesitar.
Desde ahora busca apoyo en alguien ya sea familia o amigos para que te acompañen, no a llenar el vacío pero si a ahuyentar la soledad.
Emplea el tiempo en algún hobbie, un proyecto, sembrar, coser, cocinar…en algo que te guste y te distraiga.
Y lo que más deseo es que muy pronto vuelvan a estar juntos.
No te alejes y siempre cuenta con mi apoyo.
Un abrazo,
Giselle
Giselle says
Muy pronto comenzarán sesiones online de acompañamiento en la crianza y en situaciones de familia.
Aquí en mi Web dejaré todos los detalles.
Gracias