Hoy quiero hablarles de algo a lo que me enfrento siempre en esta época del año: la alergia primaveral
Les cuento que yo tengo una prima que nunca olvidaré. Cuando éramos niñas, siempre me decía que le gustaba estornudar. . . si, asi mismo como lo oyen, ¡estornudar! Ella quería estornudar como yo (ja, ja, ja) y es que siempre he sido bien mocosa. A mi me resultaba increíble que a ella le gustara algo tan molesto como es estornudar constantemente. Yo odio estornudar, y es que cuando empiezo no tengo para cuando acabar.
La alergia es una enfermedad que afecta a un número bien alto de personas en todo el mundo (entre las cuales estoy yo) Hay diferentes tipos de alergia y yo padezco más de una pero hoy específicamente les hablare de la alergia al polen.
La alergia es una forma en que nuestro organismo se defiende de algunas sustancias externas que se conocen como “alérgenos” y que son varios; por eso hay varios tipos de alergias.
Cuando salí de mi país hacia España, siempre pensaba que me haría mucho daño el frío y resultó ser todo lo contrario. Asombrosamente para mí los episodios de alergia disminuyeron un 80%. Yo sentía que a pesar del frío yo podía respirar mucho mejor y sin tanta congestión. Así al pasar del tiempo y después de vivir varios años en lugares fríos y donde el invierno es fuerte, llegué a la conclusión de que el invierno favorece mi alergia.
En mi país solo se manifiestan dos estaciones del año: verano e invierno (realmente una porque como dicen Cuba es un eterno verano por el calor que siempre hay) así que nunca había experimentado lo hermoso de la primavera con sus colores y sus olores . . . y tampoco sabía que mi alergia estaría al 100%, ya puedo decir que sufro de alergia estacional.
¿Qué es la alergia estacional?
La alergia estacional puede darse de diferentes formas. Hay quién es alérgico al invierno y padece urticaria al frío y hay quién la primavera no le asienta (como a mí) y le dan fuertes crisis de alergia. En cualquiera de los casos el clima y la naturaleza van de la mano con la alergia.
La alergia es una enfermedad que no tiene cura y por eso hay que saber vivir con ella y de la mejor manera.
El polen: el verdadero responsable
Son partículas microscópicas como un polvillo muy fino que son producidas por las flores, especificamentes por el aparato reproductor masculino en su proceso de fecundación. Una sola planta puede producir miles de partículas de polen. Este polvillo amarillo solo lo podemos ver cuando cae y se concentra en algún lugar como en los cristales de los carros, pero cuando está disperso en el aire es imposible de ver. Es provocado por las plantas, los árboles y el césped.
Muchas personas culpan sus alergias en la primavera a las pelusas blancas como copos de algodón que vemos volando en todas partes. Éstas se llaman semillas con pelosidades y son producidas por las plantas que están germinando, pero no son las causantes de alergia.
El causante de la alergia estacional es el polen y al que el organismo de algunas personas como yo reaccionan defensivamente. Cuando el polen entra en contacto con la piel, los ojos, o cuando se respira provoca fuertes estornudos y un severo cuadro de alergia . . . definitivamente soy alérgica al polen.
Datos curiosos
La alergia al polen no solo se produce en primavera, ya que algunas plantas germinan en otras épocas del año, lo que sí en la primavera hay más concentración de polen y por tanto mayores afecciones de alergias.
Otro dato es que hay varios tipos de polen. Eso quiere decir que tu alergia depende del lugar donde vives. En España, por ejemplo, afecta mucho el polen de las gramíneas y en los Estados Unidos la ambrosía es una planta cuyo polen ocasiona muchos problemas respiratorios. Como esta planta no está muy extendida en España no es algo que los afecta.
El doctor deberá determinar a qué polen en específico se debe la alergia para así poder recetar un tratamiento efectivo.
Cómo descrubrir que eres alérgico al polen
Algunas señales son:
- Ojos enrojecidos con picazón y llorosos.
- Aparecen estornudos frecuentes y congestión nasal con abundante secreción.
- Dolor de cabeza.
- Mal humor.
Es importante que si sienten estos síntomas y se dan cuenta que ocurren en la etapa de alta incidencia del polen, o cuando están mucho tiempo al aire libre que acudan al médico. El alergista debe tener información de parte de ustedes de con qué frecuencia han tenido estos episodios y en la circunstancias que han sido.
A partir de su información le harán pruebas de alergia, que se hacen de forma subcutánea y que incluso ayudarán a determinar a qué polen en específico son alérgicos. El especialista también se basará en la información que hoy se ofrece a cerca del nivel de concentración de polen en cada área.
Ahora mismo en mi celular veo la información que en mi zona está bien alto el polen de los árboles, el del césped está moderado, y el de ambrosía está bien bajo.
Cómo tratar de minimizar los efectos de la alergia al polen
• Mantenerse informado sobre el nivel de polen en la zona donde viven es muy importante.
• Mantener las ventanillas del carro hacia arriba al igual que las ventanas de las casas cerradas durante esta época.
• Evitar ir a parques y lugares donde hayan muchos árboles y plantas sobre todo cuando el viento sea fuerte.
• Usar gafas de sol para evitar el contacto con los ojos.
• Evitar remover el polen, como barrer el patio o la terraza.
• Evitar trabajar en el cesped cuando este alto el índice de polen.
• Mantener la casa con alto nivel de humedad.
Espero que haya sido un artículo útil y les digo que es un tema en el que para nada soy conocedora, sino que simplemente he tratado de leer e indagar más sobre algo que me afecta a mi y sé que a miles de personas igual y ese es mi objetivo, compartir la información que tengo para ayudar a otros.
Así en otro artículo hablaré de mi alergia a los ácaros del polvo y algunas cosas que me funcionan.
¿Acaso sufres de alguna alergia? ¿Te gustaría compartir tu caso?
Me encantaría conocer sobre otras experiencias.
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