Le faltan horas a mi dia: ¿Cómo manejar el tiempo?

Es frecuente escuchar decir, que el tiempo no alcanza, que no damos a basto, que necesitamos más horas al dia. Es común que las personas se quejen porque no les alcanzó el día para completar todas aquella tareas que se habían propuesto.

El manejo adecuado del tiempo es un problema más común de lo que debería y más grave de lo que se piensa. El que se te pase el tiempo del dia y te hayan quedado cosas pendientes es algo que pone mucha tensión, premura y frustración en las personas. La falta de tiempo está siendo hoy una de las causas de innumerables problemas en el seno de la familia que inciden además en la sociedad. Lo cierto es que urgentemente algo habrá que hacer para bajar la intensidad y el nivel con que vivimos, porque estamos atropellando los mejores momentos y dejando de disfrutar lo más importante de nuestras vidas.

Para nadie el día tiene más de 24 horas, esto es algo que no podemos cambiar. Pero lo que sí podemos hacer para ayudarnos a ajustar el tiempo es planificarnos. La planificación es algo que a las personas les cuesta mucho, y me incluyo. Llevamos una vida agitada, apurada, llena de pendientes y de tareas que debemos cumplir, y muchas veces lo hacemos casi que por instinto. Es tan apurada nuestra vida que el solo buscar un tiempo para planificar algoes difícil.

A esto hay que sumar que no sabemos establecer prioridades. No es lo mismo algo importante pero que no es urgente a algo importante que si lo es. Para todo en la vida hay que plantearse pautas, hay que tener estrategias y el tiempo no está exento de ello.

La falta de tiempo encabeza la lista de las causas de muchos de nuestros problemas. Por ejemplo ocasiona problemas en las parejas que llegan incluso a sus máximas expresiones. Nos hace caer en una rutina que lacera nuestra creatividad y motivación.

Por el poco tiempo las personas se estresan hasta llegar a la depresión y a la pérdida o ausencia de vida social. Por otro lado la mayoría bajan la efectividad y calidad de lo que hacen.

Cuando no tenemos el tiempo suficiente para hacer una tarea que debemos terminar en un plazo establecido, lo primero que merma es la calidad de la misma debido a la prisa con la que hemos tenido que realizarla.

Esta falta de tiempo es algo que afecta mucho las relaciones familiares y la crianza de los hijos en cualquiera de sus etapas. En ocasiones pensamos que los hijos nos necesitan más cuando son pequeños, y esto es un completo error.

Es cierto que de pequeños son más dependientes, hay que cambiar pañales, darle de comer, bañarlos, etc…

Sin embargo no solo nos necesitan de pequeños,los hijos siempre requerirán de nuestro tiempo. Por ejemplo lo adolescentes son tan demandantes como un pequeño, lo que sus demandas son de otro tipo y requieren de mucho más esfuerzo por parte de los padres. Ya las tareas no son tan simples como cambiar un pañal o dar de comer. Ahora hay que dialogar, entender, acompañar y servir de guía y sobre todo velar. Si, velar y estar pendiente de ellos porque es además una edad donde son muy vulnerables y donde los amigos juegan un papel rector.

Los padres deben además en estas edades estar pendientes de las relaciones que establecen sus hijos, de lugares que frecuentan y de cualquier cambio que pueda ocurrir en su comportamiento.

Los padres de hijos adolescentes deben saber que es una edad de innumerables cambios, donde los jóvenes se están descubriendo a ellos mismos y están construyendo una proyección de su personalidad ante el mundo. Ese renacer del adolescente es complejo y complicado para él más que para nadie,por tanto será una etapa convulsa,de dudas e inseguridades que se pasan mejor si los padres están presentes en la vida de sus hijos.

Es muy importante que los padres puedan y de hecho estén totalmente involucrados en cada una de las tareas y actividades de su hijos. Desde la distancia y la ausencia es muy difícil establecer y reforzar normas de conducta y límites en la crianza.

Por eso deben procurar organizar su vida de manera tal que les permita estar con sus hijos el mayor tiempo posible. Hoy en día nos enfrentamos a este gran problema y es que hay padres que tienen que trabajar mucho para lograr el sustento de su familia. Y no es que el trabajo sea algo que atente contra la disciplina y la educación, no, pero si la falta de tiempo y la ausencia de la vida de los hijos, es algo que afecta y mucho.

Si los padres se pierden momentos únicos de la vida de sus hijos, si el tiempo juntos es muy limitado, también serán limitadas las relaciones que tendrán con sus hijos y por ende limitadas las oportunidades de educar. Hay una expresion muy comun hoy en dia y es que se dice que hay que garantizar tiempo de calidad con los hijos.

Este término de tiempo de calidad, la mayoría de las veces se interpreta como que no importa si el tiempo es poco, siempre y cuando sea bueno, sea de calidad. Es decir no importa la cantidad, sino la calidad.

Me gustaria saber, ¿a qué le llaman tiempo de calidad?

¿A que cuando estás media hora a la semana con tu hijo lo llevas a un lugar espectacular?

¿A que cuando lo ves después de varios días le traes un juguete que le encantará?

Yo discrepo de este tipo de tiempo “de calidad” porque considero que nos equivocamos al pensar que los niños miden la calidad del tiempo. Cuando mamá o papá llegan a casa, sus hijos los reciben con alegría, para ellos este es el mejor momento de sus dia y no les importa si llegan con las manos llenas o vacías. Cuando juegan a la pelota juntos, a ello no les importa si es en un terreno o es en una esquina del comedor…ellos solo disfrutan el estar con sus padres.

Somos los padres, los que usamos las técnicas de llegar con un regalo para de alguna manera sentirnos mejor por lo poco que estamos con ellos. Después esto lo enseñamos al niño y entonces nos preguntar ¿qué me trajiste?

Somos los padres los que hacemos que el encuentro pierda su verdadero valor que no está en lo que traemos en las manos… sino en el encuentro.

Analizando por otra parte lo de que no importa la cantidad sino la calidad…yo me pregunto si a una persona que le guste bailar, o hacer deporte le bastan 5 minutos de calidad.

A quien le gusta ir al cine, no se conforma con ver el trailer de la película… la quiere ver completa.

¿Por qué entonces pretendemos que nuestros hijos se tengan que conformar con los minutos que nos sobren?

¿ Por qué tienen que valerse solo de aquel tiempo que no empleemos en otra cosa?

¿Qué puede ser más valioso para nosotros como padres que poder disfrutar cada segundo de la vida de nuestros hijos?

Tendríamos que replantear esa teoría de “Tiempo de calidad” y llamarlo solo Tiempo.

El tiempo es lo único que al final cuenta, el tiempo que disfrutes de tu hijo, que estés presente en su vida y que le des la oportunidad de disfrutar de ti..eso es lo que te dará la oportunidad de incidir en ella.

Los psicólogos analizan este término “ de tiempo de calidad” como una manera en que los padres justifican el poco tiempo que tiene para dedicar a sus hijos.

Si hay algún padre que tiene que trabajar sin descanso porque no tiene opción, no queda de otra que solo dar tiempo de calidad,pero no es lo que solo necesitan. Lo ideal será poner en perspectiva su vida y analizar si realmente necesita privar a sus hijos de su tiempo, si realmente está manejando su tiempo de manera eficiente.

Muchas personas simplemente se enredan en esta sociedad de consumo y después solo necesitan trabajar y trabajar para poder pagar y seguir además adquiriendo todo aquello

( material) que desean. Se olvidan que nada de eso es lo que importa, lo que ellos necesitan es a sus padres a su lado la mayor cantidad de tiempo posible.

Los niños no necesitan tantos juguetes, no necesitan el último invento tecnológico, no necesitan ir a un restaurante de lujo, ni vestir ropa de la mejor marca. Nada de eso quedará en sus vidas,lo que sí quedará en su memoria grabado aun cuando ya no estemos los padres, es todo aquel tiempo que ellos pudieron disfrutarnos, es aquel almuerzo que siempre compartiste con él más allá de donde fuera, aquellos cuentos que les leías, el buscarlo a su escuela, el acompañarlo a ver su obra de teatro, ayudarlo en sus tareas escolares…en fin lo único que queda y que educa es el que tu hijo sepa que siempre estuviste ahí para el.

Este correr en el tiempo provoca el agotamiento de los padres, si trabajan muchas horas al dia es obvio que al llegar a casa solo quieran descansar

¿Dónde está el tiempo para jugar? , ¿dónde está el tiempo para conversar sobre cómo fue el día?,¿ dónde está el tiempo de comer juntos a la mesa?

Esta ausencia daña y afecta la relaciones padre hijos y provoca en muchos casos comportamientos de rebeldía y desobediencia, ya que el niño lo que siente es enojo ante la ausencia de uno de sus padres o de ambos.

La falta de tiempo afecta y mucho la educación, afecta y mucho el manejo de determinadas situaciones que se nos presentan con los hijos. Cuando los padres están agotados físicamente, también lo están en la crianza. Cuando no tienen tiempo para sus hijos, porque tienen muchas cosas que hacer, y que no digo que no sean necesarias e importantes, resultará muy difícil que puedan educar con responsabilidad y respeto.

Los padres tienen dos vías muy poderosas para aportar a sus hijos. Una es proveer de todo aquello que necesita para vivir, como vestirlo, alimentarlo, darle un techo, una escuela. La otra solo se resume en un palabra…tiempo, todo el que puedas porque el tiempo no regresa, avanza rápido y no será suficiente para educar, enseñar y disfrutar de tus hijos.

Además el tiempo que le permitas a ellos que disfruten de sus padres, lo agradecerán siempre porque a ellos también se les acaba esa oportunidad.

Enemigos del manejo del tiempo

1. La prisa. Vivir a prisas es perderse los momentos más placenteros de la vida. La prisa nos hace cometer errores e incluso derrochar más el tiempo al tener que corregir el error.
2. Falta de planificación. Si no planificamos los días, las horas, las tareas será muy complicado cumplirlas. Esto hará que estemos como navegando sin rumbo, es decir vivimos sabiendo que hay muchas cosas que hacer pero no nos hemos organizado para hacerlas.
3. No establecer prioridades. Si no le damos a cada tarea el orden de prioridad que lleva, hará que estemos quizás ahora haciendo algo que podía esperar y sin embargo aquello realmente era necesario lo hemos dejado para después.
4. Ser Finalista. Si dejamos las cosas para última hora el tiempo será implacable con nosotros porque tendremos la presión de que necesitamos terminar cierta tarea y el tiempo no nos dará esa espera.
5. No saber decir que no. Si somos de aquellas personas a las que nos cuesta decir, no puedo. Nos llenaremos de tareas y de actividades que realmente al final no vamos a poder cumplir o si lo hacemos será a costa de nuestro tiempo personal.
6. Ponerse muchas metas. Cuando nos ponemos muchas tareas estamos atropellando el tiempo y a su vez poniéndonos una presión para hacer lo indecible para cumplir todo.

Consejos par ser efectivos con el tiempo

Deja la prisa, aun cuando lo estés. Toma la vida con calma y date el tiempo suficiente para cada cosa. Siempre hay algo que puede esperar.
Planificate, usa calendarios. Llevar una agenda de cosas no solo es para una oficina, también es muy efectiva en la vida. Coloca en un lugar visible las tareas de la semana y ponle dia y hora.
Haz una lista de prioridades de las cosas que tienes que hacer. Dale a cada una el lugar que ocupa según su importancia.
No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy. Las personas que posponen siempre tendrán problemas con el tiempo porque las tareas se unen.
Prepárate de antemano para que no pierdas tiempo y seas efectivo a la hora de hacer tu tarea.
Aprende a decir que no. No es malo no aceptar un trabajo o una tarea si sabes que ya tienes mucho qué hacer y esto será demasiado para ti.
Deja espacio siempre para tu vida personal, tu familia, tus hijos. Ese tiempo es sagrado y necesario.
Incluye en la planificación tu tiempo de descanso, de relajación y de sueño..ese tiempo deberás restarlo de las horas que te quedan del dia y por tanto sabrás el tiempo real con que cuentas.
Dosifica las tareas. No pongas varias tareas complejas juntas. Trata de establecer un equilibrio según el tiempo y la envergadura de lo que debes hacer.

Recuerda que el tiempo vuela y no regresa. Tu tiempo de hacer, de amar, de criar y de vivir es ahora no lo pospongas más. Ese dia es hoy así que después de leer esto mira a tu alrededor y piensa si realmente en tu lista están establecidas las prioridades correctas y si está incluido el tiempo de tus hijos, de tu familia y el tuyo.